El Valle de los Caídos es como es, pero podría haber sido de otra manera si no hubiera sido porque el primer arquitecto del Valle, Pedro Muguruza, hubo de abandonar la dirección técnica de las obras por enfermedad. Le sucedió Diego Méndez, arquitecto de la Casa Civil de Franco. A Méndez, gran arquitecto, se le deben las edificaciones del Valle según como las conocemos, especialmente la Cruz, de la que Muguruza no dejó más que unos pocos bocetos.