He aquí el relato de las surrealistas consecuencias de una decisión más que discutible de Juan Carlos de la Mata, conocido por su gestión contra el Valle de los Caídos desde su puesto de titular del departamento de Actuaciones Histórico Artisticas de Patrimonio Nacional, pues se negó a continuar pagando horas extraordinarias a un lutier encargado de la custodia de un violonchelo Stradivarius de la colección del Palacio Real, mientras se destinan partidas presupuestarias a gastos innecesarios, como adecuar el que era un aseo común para uso exclusivo de un directivo. El uso inmoral de fondos públicos a costa de recortar en lo imprescindible en contra de lo que debiera ser una gestión leal. Con estos bueyes hemos de arar mientras el PP, por complejos o por inutilidad, siga sin sustituir a gentes de este pelaje por personal eficiente y profesional en la Administración Pública.
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7 commentarios
Ramón · 14 octubre, 2014 a las 16:36
Por lo que veo no hace una cosa bien, así que lo destituyan y santas pascuas !!!
Hermenegildo · 12 mayo, 2012 a las 17:55
¿Juan Carlos de la Mata es funcionario o forma parte del personal eventual de PN? Si es funcionario y tiene su plaza en propiedad, poco puede hacer el Gobierno.
linares · 12 mayo, 2012 a las 23:03
Efectivamente. Lo que si puede hacer el gobierno es sacar al Sr. de la Mata de cualquier puesto de responsabilidad en las que tenga bajo su mando Estradivarius y esculturas como la Piedad del Valle de los Caídos.
Me permito «rescatar» uno de los videos que desde la ADVC preparamos, explicando muy a las claras lo que estaba sucediendo con la Piedad del Valle de los Caídos. En el video aparece, intentar explicar lo que no tenía explicación el Sr. de la Mata.
Un saludo
http://youtu.be/BjhAa5HKm5M
Ricardo · 12 mayo, 2012 a las 4:31
Queremos creer que el tiempo de los disparates ideológicos ha pasado desde el cambio de gobierno, también para el Valle. Y creo que las decisiones no las toma el director de actuaciones de esto o aquello, aunque le toque luego ejecutarlas. Podemos confiar en que las decisiones del actual presidente de PN serán razonables y de acuerdo no sólo con los técnicos más competentes en el tema, sino también con el Valle, porque parece hombre circunspecto, de cultura y con criterio.
Por lo demás, siento mucho tener que coincidir con los que lamentan que el partido de gobierno siga con ese problema suyo respecto de limpiar la Administración de los servidores públicos heredados del pasado que, con piel de oveja o incluso sin ella, usan o pueden usar su posición para boicotear la acción del Ejecutivo elegido. Para gobernar con éxito se necesita, entre otras cosas, eso de cesar a los incompatibles peligrosos. Por cierto que desde siempre y aquí y en Sebastopol.
linares · 12 mayo, 2012 a las 0:21
Conocí a Juan Carlos de la Mata en el año 1988 cuando era Delegado de Patrimonio Nacional en San Lorenzo de El Escorial y «gobernaba» en España el PSOE de Felipe González.
Hermenegildo · 11 mayo, 2012 a las 23:31
Juan Carlos de la Mata ya era director de actuaciones histórico-artísticas de Patrimonio Nacional en la época de Aznar, como lo prueba la siguiente noticia:
http://elpais.com/diario/2002/07/07/madrid/1026041067_850215.html
Guripa · 9 mayo, 2012 a las 16:09
Cuando el PP ganó las elecciones del 20-N fue para hacer lo que sus votantes, entre los que no me encuentro, esperaban y creían que haría. No basta con cambiar al presidente del gobierno y ministros. Es necesario depurar toda la administración pública de colaboradores del PSOE y demás cómplices hasta el último escalón de cada ministerio. Las consecuencias de no hacerlo así las pudimos ver tras el 11-M, y no hace falta explicar más.
El individuo éste de la noticia ya acreditó su condición de enemigo declarado del Valle de los Caídos durante demasiado tiempo. No removerlo de sus responsabilidades equivale a convertirse en colaborador suyo y, por tanto, en cómplice de sus desmanes.
¿A qué esperan en el PP para tomar las riendas del gobierno en todo su concepto? ¿A que su inacción les eche de nuevo a la oposición?